La alegría que supone descubrir un pequeño dibujo de tu infancia es indescriptible y cuando lo observas, se te pone una especie de sonrisilla embobada…
Así es cómo me puse yo hace poco, cuando mi madre, en una visita a casa de mis padres, me dijo:
– Merceditas, mira, mira… Ven a ver lo que he encontrado el otro día haciendo limpieza en estos papeles…
De repente veo a mi madre sacar de un armario, guardado con sumo mimo envuelto en papel seda, un trozo de cartulina… Y veo ESTO:
Mi madre, que me ve esa cara de alegría y embobada, me explica lo siguiente de la pieza:
– Es un dibujo que me hiciste con 5 añitos cuando estaba embarazada de tu hermana.
Me mira y me sigue explicando, mientras le da la vuelta a la cartulina:
– Y esta es la casa que tú te imaginabas a donde nos íbamos a mudar.
Mi cara de inusitado entusiasmo, expectación y alegría siguen en aumento… Mi madre continúa:
– Y para terminar, algo que ya se te veía venir desde que eras pequeñita, pequeñita. Tu amor por los gatos y por cualquier animal en general. Te acercabas sin ningún miedo a todo bichito que veías, ya fuera en la calle, en los parques, en casa de amigos, te daba igual… Tú ibas y lo abrazabas (si te dejaban los pobres animales) o lo tocabas…
Fijaros en el marco que le tiene puesto mi madre a esa foto.
Como ya dije, es muy difícil describir este tipo de emociones… Sólo puedo decir: gracias papá y mamá por todo.
Marta
Que bonito post!!
Es genial revivir asi los momentos :)
Mercedes
Muchas gracias, Marta!
La verdad es que sí, es muy bonito recordar aquellos tiempos! Y lo que más me ha gustado ha sido ver la imaginación que se tiene con esas edades!! :))
Ruby
Que lindo!!! a mi me paso lo mismo cuando mi madre vino de visita el año pasado me trajo toda mi carpeta de dibujos que hice en parvulario tenia entre 5 ó 6 añitos :3
Me trajo tantos recuerdos y tienes razón a esa edad la imaginación no tiene limites!! :3
victoria villa
que cosa mas bonita y emocionante… que ninia mas dulce :-)
Mercedes
Muchas gracias, Victoria! :)))